Meliuli

Me gustan los caracoles, no para comer, sino más como mascotas. No me gusta mi vecino de enfrente, que lanza los caracoles por encima de la tapia. ¿Puede molestar un caracol?

Me gusta Sex and the City, la peli (y la serie). No me gusta There will be blood. Aunque no sea crítico de cine… supongo que mi opinión también cuenta.

Me gusta los nuggets de pollo (mi último descubrimiento!). No me gusta tanto la «mayostaza»: una nueva generación de mayonesa creada en UK, que viene a ser mayonesa con sabor a mostaza. ¿Aún quedan sabores por inventar?

Y yo prefiero playa que montaña… aunque sea en invierno ;)

Una de las cosas que más me sorprendió cuando llegamos a San Francisco fueron los leones marinos. La noche antes de irnos, estuvimos viendo un reportaje de Planeta Finito (por cierto, muy recomendable!), de El Gran Wyoming en San Francisco. En él contaban las cosas más curiosas o típicas para ver en la ciudad, entre ellas, los leones marinos.

Los fuimos a ver nada más llegar, y la verdad es que son geniales. Nadie sabe muy bien por qué (al menos nadie me lo ha sabido explicar…), pero van allí todos los años. Al principio, los intentaron echar, pero se dieron cuenta de que atraían a los turistas, así que decidieron hacerles un hueco en el Pier 39, y de paso aprovecharon para hacer un mini-centro comercial muy mono.

Otra de mis cosas, o mejor dicho, amigos favoritos de la ciudad, estaría horas mirándolos y escuchándolos…

A mí me gustan los zapatos.

Nunca me había parado a ver otro enfoque, ¿por qué me gustan? Pues no sé… me gustan y ya está.

Después de mucho viajar, con mis cajas de zapatos a cuestas, preguntar por el mundo y documentarme viendo series como Sexo en Nueva York (especialmente el personaje de Carrie), ver tiendas y más tiendas de zapatos en Chueca (entre otros muchos…), he encontrado una camiseta (paradoja que sea una camiseta y no una chancla…) que lo explica todo:

Ni yo, ni la mismísima Cenicienta lo habría dicho mejor…

Todo el mundo cree que montar un negocio es caro… bueno, pues todo depende de lo que te quieras gastar, como casi todo.

La prueba está en la nueva tienda de complementos de Diesel en Carnaby Street. La acaban de abrir (o al menos yo la acabo de descubrir…), y aunque la idea seguro que la ha tenido algún diseñador gráfico importante y ha costado una pasta, no creo que hayan tenido que invertir mucho en llevarla a cabo. La tienda en cuestión tiene las paredes recubiertas de cartón y con cajas pegadas, a modo de baldas, grandes para los bolsos y más pequeñas para las gafas de sol… Vamos que no han gastado ni en pintura, sólo cajas de cartón y pegamento, aunque haya sido del bueno, para que no se caigan ;)

El viernes por la tarde al salir del trabajo, me fui a dar una vuelta por Oxford Street, a ver las novedades de la temporada. Por si acaso, os digo que es una de esas calles en las que siempre hay mucha gente, y de todo tipo, llueva o haga sol, con las tiendas abiertas o cerradas, … así que os hacéis una idea de como se pone un viernes por la tarde.

Estaba en una tienda y de repente oí jaleo en la calle y gritos, y pensé «alguna se ha liado…», y al poco empiezo a oír risas y ver que la gente se para, así que me asomé, no fuera que me estuviera perdiendo algún espectáculo. Efectivamente, había dos tíos de unos treinta-y-muchos lanzándose sobre unas montañas de bolsas de basura, en lo que llegó el camión de recogida a estropearles (por supuesto que sin mala intención…) la fiesta. Ellos seguían haciendo el «salto del ángel » sobre las bolsas que quedaban, así que los basureros, esperaron pacientemente a que acabaran su pequeña diversión…

Moraleja: el que no se lo pasa bien, es porque no quiere!

Flores flores flores… ya sé que me repito… pero cómo me gustan las flores!

No os he contado nada de mis vacaciones (si hay alguien perdido… he estado en San Francisco), así que hoy que he estado viendo las fotos, pues aquí estoy. No sé si os contaré cosillas por capítulos, o simplemente cuando se me ocurra. De momento aquí os pongo una muestra de flores de San Francisco…

La primera (arriba a la izquierda) parece de papel, y hemos pillado una abeja in-fraganti… que le da el toque de realidad.

La de debajo, son mis flores más favoritas. En San Francisco las hay por todas partes, mezcladas de dos tipos: lila claro y lila oscuro en el envés, y blancas y morado el envés, con el botón oscuro también. Son como margaritas, pero raras. Sorry… pero no sé explicarlo mejor :)

Si habéis tenido un día duro, regalaros una flor!

Hola a tod@s!

Aquí ya estamos casi listos para pasar un día estupendo. Aunque el cielo amenaza con llover, ya nos regaló ayer un día soleado (y eso que predijeron lluvias abundantes…), si es que ya lo dicen, que en abril aguas mil!

Espero que vuestro día también sea genial.

Feliz día!

Ayer fuimos al «Día Anual de la Cometa» en Streatham Common. Por lo visto es un evento que hay todos los años en el parque de Streatham. El parque es estupendo, con una gran esplanada y otra zona con más árboles. Y aunque el día se vio un poco deslucido por la lluvia, nos pareció genial de todos modos. Había puestos de comida y bebida, y por supuesto también de cometas. Hubo algunos invitados especiales, tipo exhibición, unos con varias cometas y otros de «vuelo de cometa sincronizado», muy chulis, aunque ninguno de ellos pudo acabar su show porque cuando por fin dejo de llover, también paró el viento…

Estuvimos a punto de comprarnos una cometa y probar… pero sin viento para usarla, no nos pareció la mejor inversión del día, y menos aún siendo novatos… jeje, otra vez será.

A pesar de los inconvenientes fue un evento simpático, con gente de todas las edades y cometas de todos los estilos… sin duda habrá que volver otro año, a ver si el tiempo acompaña un poco más.

A estas alturas, ya todos sabemos lo caro que es Londres, y también lo caras que suelen ser las flores… Bueno, pues hemos encontrado la excepción a estas dos reglas, el caso en el que la suma de las dos circunstancias, no es «flores carísimas en Londres», sino todo lo contrario. Me explico, que me lío y me pierdo. El domingo estuvimos en un mercado de flores en Columbia Road (uno de los varios mercados de la zona de Liverpool St Station). Tienen de todo para el jardín y la jardinería, y muchas de las tiendas de la calle también pertenecen al gremio. Hay flores, macetas, injertos y arbolitos, de todos los tipos y precios, y a medida que se va acercando la hora de cierre, salen las ofertas tipo «2 x 1» y «lleva 3 y paga 2». Así que el domingo nos hicimos con un generoso ramo de 40 rosas de la variedad pequeña por… £5! (para los que no estén puestos en temas de cambio de moneda, son unos 6.5 €!). Vale que los tenderos no serán guapos como en Selfridges… pero como no me lo tengo que llevar a casa… jeje.

En este mercado las orquídeas estaban a 4 o 5 libras la maceta… y la última vez que yo compré una me costo 40 €…

Y no es la primera vez que ésto nos ocurre. La semana pasada nos compramos unos tulipanes a £1 el ramillete, 2 ramilletes eran unos 20 tulipanes, por £2 (solo 3 €!).

Como en todas partes, el límite superior lo pones tú mismo, porque si quieres gastarte £40 en una birria de ramo, pequeñajo y lacio, pues también lo puedes encontrar…, aunque ni siquiera eso te asegura un tendero guapo!

El domingo fuimos a pasar el día a Trafalgar Square y Leicester Square, a ver el desfile del Año Nuevo Chino y ver los fuegos artificiales de día (y de noche). La verdad es que hay que reconocer que aun siendo de día se ven colorines, y aunque lo que más hay es humo y ruido, el espectáculo en conjunto estuvo muy bien.

Vimos los de las 14h, de día, y los últimos a las 18h, que ya era de noche (había cada hora desde las 2 a las 6 de la tarde). Y aunque los que hubo durante el día estuvieron bien, mereció la pena esperar para ver los últimos de la jornada, porque fue tan espectacular que por unos momentos parecía que le estaban prendiendo fuego a la plaza…

El desfile estuvo bien, aunque yo esperaba que durase mucho más y con más cosas, ya que habia leído que decían que era uno de los desfiles mas largos (junto con el de San Francisco) fuera de Asia. Así que empezaba a las 11, y llegamos a las 11.45 hacia donde acababa, y casi nos lo perdemos, porque la mitad ya había pasado… Así que con todos mis respetos, no creo que sea uno de los desfiles más largos ni que sea comparable al de San Francisco, que el año pasado duró unas 5 horas… (no digo que las 5 horas fueran apasionantes, pero largo si que fue).

Como había tanta gente por todas partes, no pudimos completar las celebraciones con una buena comida china. Chinatown se desbordaba de gente, chinos, y casi más «no chinos», pero ya volveremos a uno de los buffets que vimos…mmmm, que olorcito tan apetecible salía de todos!